Esta semana, ha traído muchas novedades: tengo fecha de boda, sí sí sí, 17 de abril de 2009, he asistido a las clases del CAREI, tengo estanterías y armarios nuevos para llenarlos de carpetas y libros y me han ofrecido un trabajo de profe de español para mamás inmigrantes. Estoy contentísima, ya podían ser todas las semanas así.
La FAPAR, la federación de asociaciones de padres y madres de alumnos de Aragón, imparte cursos de español para los padres de los alumnos extranjeros en los colegio e institutos públicos de Aragón, y el jueves me llamaron para ofrecerme un puesto en dos coles: Luis Vives, en el barrio de Torrero, al cual llego si hago un salto con efecto desde el balcón de casa, y el María Moliner, en el barrio de San José, muy cerquita.
Lo que la FAPAR pretende es la integración de las familias inmigrantes desde las APAS y lograr la participación activa de los padres, tanto en la comunidad educativa como en la sociedad en general y las clases de español son en muchos casos el único nexo existentes entre ésta y las familias. Las clases son gratuitas, en un horario que facilita la asistencia y completamente heterogéneas en cuanto a procedencias y niveles de estudios y de conocimiento del español, lo cuál es un reto al que estoy deseando enfrentarme. Me han informado de cómo son los grupos, el ambiente, pero lo podré comprobar personalmente el martes que viene. ¡Qué nervios! Para comenzar, dispongo de mucho material y de una programación inicial que tendré que modificar para adaptarla a mi metodología.
Hoy, que ya he aterrizado de tanta emoción semanal, empezaré a organizarme, al menos comenzaré buscando información acerca de los países y lenguas de procedencia de las alumnas, todas son madres, que tengo en un principio.
Estoy loca por comenzar a dar este pequeño primer paso, esta pequeña nueva etapa.
La FAPAR, la federación de asociaciones de padres y madres de alumnos de Aragón, imparte cursos de español para los padres de los alumnos extranjeros en los colegio e institutos públicos de Aragón, y el jueves me llamaron para ofrecerme un puesto en dos coles: Luis Vives, en el barrio de Torrero, al cual llego si hago un salto con efecto desde el balcón de casa, y el María Moliner, en el barrio de San José, muy cerquita.
Lo que la FAPAR pretende es la integración de las familias inmigrantes desde las APAS y lograr la participación activa de los padres, tanto en la comunidad educativa como en la sociedad en general y las clases de español son en muchos casos el único nexo existentes entre ésta y las familias. Las clases son gratuitas, en un horario que facilita la asistencia y completamente heterogéneas en cuanto a procedencias y niveles de estudios y de conocimiento del español, lo cuál es un reto al que estoy deseando enfrentarme. Me han informado de cómo son los grupos, el ambiente, pero lo podré comprobar personalmente el martes que viene. ¡Qué nervios! Para comenzar, dispongo de mucho material y de una programación inicial que tendré que modificar para adaptarla a mi metodología.
Hoy, que ya he aterrizado de tanta emoción semanal, empezaré a organizarme, al menos comenzaré buscando información acerca de los países y lenguas de procedencia de las alumnas, todas son madres, que tengo en un principio.
Estoy loca por comenzar a dar este pequeño primer paso, esta pequeña nueva etapa.
1 comentario:
Mucha suerte con las clases, seguro que salen muy bien!
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