Muchas veces he pensado en llevar a clase alguna actividad para fomentar la multiculturalidad pero no sabía bien como enfocarla y hasta ahora no he tenido mucho tiempo de buscar una adecuada. Sin embargo, en la clase del viernes vi una escena que me encantó y me alegré mucho de tener una clase con tan buen ambiente. La cosa fue así: como no había suficientes mesas para todos algunos tuvieron que compartir y en dos mesas estaban tres alumnos: un gambiano, una rumano y un argelino. De diferentes edades además: 22, 45 y 35, creo. Los tres debatían sobre qué respuesta era la correcta en un ejercicio. Cada uno daba sus razones y ayudaban con su explicación al gambiano, que no lo entendía muy bien. Me encantó verlos hablando en español entre ellos, ayudándose y divirtiéndose.
Eso sí es multiculturalismo.
1 comentario:
Escenas como esta hacen que nuestro trabajo merezca la pena.
Un saludito
Estela
Publicar un comentario